Con los DOS?... hablas en serio?

Son las nueve de la mañana ya esta el teléfono sonando. Toño? Ya tienes ganas de darle gusto a la polla? Él es un cliente desde hace mucho tiempo y siempre me llama súper temprano porque quiere que le cunda el día... Conmigo. Le gusta tomárselo con calma pero es súper generoso la verdad. A mí me encanta que venga porque sabe hacerme las cositas que me gustan, ya sabéis esos juegos tan guarros que me gasto. Es que me lo hace como nadie. Yo con este dios me pasó el día y es que me encanta porque la verdad juguetear con su polla contra mi coño es algo que me apasiona muchísimo más que meterla. 

Seguramente esta especie de fetiche viene desde que soy bien jovencita que me pillaron por banda y me "enseñaron lo que vale un peine"por decirlo de alguna manera y desde entonces mi placer lo consigo así, con nombres mayores frotándome sus pollas. Al principio me daba asco como ya he contado algunas veces pero es precisamente seas con lo que me lleva al éxtasis. 

Cuando me lo hacían al principio sabía que no estaba bien pero la cosa tenía algo que me hacía volver. Ya contaré la historia cómo empezó porque tiene tela. Ahora ya no me molesta, al contrario porque me enseñó descubrir mi cuerpo o al menos aprendió a vivir con ello pero hubo un tiempo que estaba muy confundida. 

Pues esta mañana me viene Toño y me dice que quiere venir a verme pero que quiere traer compañía. Montar Melo con dos!!? 
le dije que como ya sabía no suelo hacer ese tipo de servicios pero me aseguró que era un amigo suyo de mucha confianza y desde hace mucho tiempo. Que confiara en él. La verdad que a Toño lo conozco desde hace muchos años ya y sé que no me va a meter en problemas. 

Pensando en que me lo iba a montar con dos la verdad es que mi pipa empezó a palpitar locamente. De modo que le dije que sí y me fui rápida a prepararme. 


Esta pieza es un body muy bonito de gasa lo malo es que le falta la entrepierna pero precisamente es que eso es lo bueno. Confieso que estaba muy nerviosa y me preparé para''los chicos"

Fue súper guay porque si Toño es ya mayor su amigo podría ser demasiadas incluso. Con una cara de baboso vicioso que se le caía. Les recibí con una batita, por llevar algo pero ya en el salón me la abrieron a la par que yo les tocaba a los cipotes por encima de la portañica. Aquello no iba mal pero mientras yo les pedía los dineritos. Cariños, cobrar por adelantado siempre es sagrado. 

Al llegar a la habitación ellos estaban desnudos y yo de aquella guisa de la foto. Ni dos minutos tarda en tener una polla contra mi coño y otra en la boca. 

No sabía ni cómo se llamaba el amigo pero si el placer que le estaba dandole la polla era el mismo que yo estaba recibiendo en mi coño, podía comprender porque perdería el equilibrio. 
Manos salió de todas partes para sobarme las tetas. No paraba de salir lenguas de todos los rincones para chuparme. Yo estaba en éxtasis. La polla del colega era bastante decente. Como a mí me gustan grandecitas, su capullito redondito....mmm y el maromo preguntaba que porque no me follaba..."pero Toño, joder metesela. No ves cómo está la muy puta?"

Yo no podía hablar porque tenía la boca llena pero mi amiguete salió en mi defensa,''no entiendes lo que es jugar. Es mucho más divertido, duras lo que quieras sin correrte y mira cómo está la tía que se retuerce de gusto. Tendrás que ver ese coño mojado"efectivamente. Cuando despegó la polla y se la toqué, era un charco. Ese momento lo aprovechó el amiguete para ponerse un preservativo y metermela a tirón. No me lo esperabais solté un ,"Ayyy!"por lo inesperado. La verdad es que tampoco esperaba que me pidieran permiso para meterme una polla pero es que tampoco me lo esperaba en ese instante. 

Mientras yo a Toño le chupaba el cipote bien chupado, sentí al camarada palpitar dentro de mí. Se estaba corriendo! Es que no había durado ni un segundo. Y entonces me saqué la polla de Toño de la boca y mientras me reía comenté que se estaba corriendo ya y claro mi amigo fue cuando le dijo que por eso le gustaba tanto el otro jueguecito porque ya había terminado él mientras nosotros seguíamos con la apoyadura con ganas de más caña. Y la diversión no estaba más que empezando. Yo caliente, el Vegeta caliente y una polla dentro de mi coño que se acababa de correr pero que el otro no me la sacaba. 

Menudo cuadro! La verdad que era todo muy morboso y muy divertido. Y me estaba poniendo perra por momentos. 

Ojalá ese rato no se hubiese acabado nunca! Pepe, el amigo de Toño, una vez se sacó el condón quise probar también el elixir de los reflejones, básicamente por probar si era tan bueno. Entonces primero se la mamé para limpiarse la y luego le dije, "mira, haz una cosa, basta una paja poniendo el capullo contra mi pipita. Tú haces así como te digo y verás qué gustito nos damos"

Me abrí mucho de piernas y por supuesto le seguía comiendo la polla a Toño que le flipaba viendo a su amigo pajeándose contra mi almeja. El PP flipando en colores..."pero coño, esto es una pasada!"ya te lo dije,  le contesté. 

Cuando ese pedazo de hombre, a sus años, descubrió lo que eran jueguecitos íntimos, tan calientes y exclusivos, me dijo que le estaba creando adicción. Por supuesto que volvería pero con la condición de que jugáramos mucho vale?... Vale dice jajaja. Todo lo que quisieras cariño. 

Y desde ese momento las pollas se me turnaban y yo estaba en un frenesí, como en una montaña rusa porque cuando yo me corro siento como si me hubieran tiradores de un ascensor. Es tan asqueroso y a la vez están... Es verdad da mucho asco porque los viejos no es una cosa bonita pero a mí me da mucho gusto estar con ellos y sus pollas y me calientan y por qué me calientan? Porque mi primer contacto con el sexo fue así y es como mejor llego. Y es una dualidad porque da asco pero está rico. 

Pepe, me dio una buena propina. En su vida lo había pasado tan de puta madre y me prometió que volvería muy pronto. La verdad, no me hubiera importado estar más rato. Yo estaba cansada pero los agote... Pobres! 

Cuando al rato, después de una ducha, quitarme las babas y tumbarme sobre una cama limpia con el dinero en la mano, pensé en lo sórdido que era todo, pero ya estaba pensando en otra llamadita. 

Cuánto vicio llevo encima! 

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